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Aunque no se permite la reconsideración o apelación cuando una visa es denegada, es posible pedir una revisión judicial ante el Tribunal Federal de Canadá. Esta vía es onerosa, ya que debes estar representado por un abogado.
Debes tener en cuenta que ante esa alta instancia no debes presentar las mismas pruebas y esperar obtener un resultado diferente, sino que tienes que demostrar que el gobierno cometió errores fundamentales al tratar tu caso.
Otra vía legal consiste en acudir a la Comisión de Derechos Humanos de Canadá si crees que fuiste discriminado. Para ello necesitas pruebas bastante sólidas para demostrar que sufriste trato discriminatorio por parte de un oficial de visas.
Ninguna de las vías de apelación resultará fácil o económica, así que la mejor opción es solicitar nuevamente la visa incluyendo mejor documentación de soporte.
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